Si tu perro come muy rápido, puede ser un síntoma de ansiedad.

Cualquier comportamiento compulsivo suele avisarnos de que el equilibrio mental de nuestra mascota está afectado por algún motivo.

El estrés en perros es muy común, sobre todo en entornos urbanos, puesto que este no es su medio natural. Tráfico, ruidos, espacios cerrados, ir atados a una correa, bicicletas, gente, niños, otros perros… La rutina diaria de un perro en la ciudad puede llegar a ser muy estresante, especialmente para ciertas razas más sensibles o para perros de pequeño tamaño, por naturaleza más inseguros.

Precisamente el momento de la comida puede convertirse en una oportunidad perfecta para aliviar los nervios y mejorar su bienestar del día a día.

Mi perro no mastica, engulle

Los perros tienen tendencia a comer rápido, incluso a tragar sin triturar antes la comida. El motivo es instintivo: para un perro los alimentos son un bien de primera necesidad y en estado salvaje conseguirlo es esencial para sobrevivir, pero no siempre fácil. Por eso su aparato digestivo está preparado para poder ingerir de una forma rápida y segura tanto altas cantidades de comida como piezas de gran tamaño.

En su actual entorno doméstico, el perro ya no tiene necesidad de esforzarse para conseguir llevarse un bocado a la boca, ni disputar el alimento con nadie. Recibirá con facilidad sus raciones diarias de pienso a sus horas establecidas; sin embargo, a pesar de la evolución de su especie, su instinto sigue activo.

Quizá también has notado este comportamiento durante el paseo, cuando tu perro coge algo con la boca y, en cuanto te ve mirarle, lo traga de golpe. Este mecanismo de protección de recursos es completamente natural, aunque también puedes aprender cómo evitar que tu perro coma cosas del suelo en la calle.

Es muy normal que tu mascota coma sin masticar. Sin embargo, debes prestar atención a la velocidad con que lo hace para confirmar si es un signo de ansiedad que, además, puede acarrear otros desórdenes como sobrepeso o problemas respiratorios.

Lo ideal es conseguir que el perro pase de comer en 50 segundos a hacerlo durante 50 minutos

La comida como terapia antiestrés

Para lograr nuestro objetivo de reducción de estrés aprovechando este momento del día, podemos plantear la comida como un juego.

Para los perros, la vida es juego; si le presentamos pequeños retos divertidos, disfrutará la comida al tiempo que estimula su mente.

¿Cómo hacemos esto? Sustituyendo su bol clásico de pienso por otros recipientes más interesantes. La cuestión es hacer que alcanzar su ración no sea tan fácil como meter el hocico en el cuenco.

Veamos algunos ejemplos:

– Juguete de inteligencia

Tienes muchas marcas y modelos donde elegir, pero quizá el comedero tipo Kong es el más conocido por su interesante diseño. No solo complica el acceso al pienso y lo convierte en un juego de lógica, sino que puede llegar a tener al perro entretenido de 20 a 40 minutos, lo cual es un ejercicio mental de calidad.

20 minutos de juego mental para un perro equivalen a 1 hora de ejercicio físico

Una ventaja de este accesorio es que permite muchas posibilidades a la hora de combinar rellenos. Puedes aprender alguna sugerencias de presentación, junto a sus múltiples funciones en nuestro artículo sobre los 7 beneficios del Kong para perros.

También existen diferentes gamas adaptadas a la edad y tamaño del perro, con distintas durezas, formas e incluso sprays de relleno tipo paté.

– Pelota dosificadora

Muy similar al Kong, este juguete consiste en una bola hueca con un circuito interior y un único orificio de entrada-salida. Por él se mete grano a grano el pienso o snacks, se agita para que se disperse por dentro, y se le da al perro. El diseño interno de la pelota es una especie de laberinto, por eso tiene efecto dispensador y el animal debe moverla e interactuar para lograr que salga el relleno.

Otro método ideal para estirar los minutos correspondientes a la comida y potenciar la inteligencia de tu mascota a la vez que se divierte. Este tipo de pelotas rellenables para perros son también un complemento perfecto para trabajar la independencia en casos de ansiedad por separación.

– Alfombra olfativa

Los juegos de olfato son una de las mejores opciones para activar la mente del perro, además de desarrollar su autoconfianza. Este tipo de accesorio es un tapete con distintos pliegues de tela donde pues esparcir y esconder el pienso o los premios favoritos de tu mascota. Al igual que en el resto de accesorios, te recomendamos comenzar con una dificultad baja, para que obtenga resultados al principio de manera sencilla y no se frustre. Según coja práctica, puedes ir complicando los retos y cada vez podrá dedicar más tiempo a buscar la comida en su alfombra olfativa.

– Comedero slow food

Si prefieres mantener el formato cuenco, también puedes optar por la versión «slow» del bol tradicional. Los comederos de control de ingesta son recipientes que tienen un diseño irregular en la base que complica la glotonería. Su fondo no es plano, por lo que obliga al perro a coger los gránulos de pienso de forma individual o en pequeñas dosis, en vez de llevarse todo de un bocado.

Lo mejor de todos estos accesorios es que puedes combinarlos entre sí, para que la mente del perro permanezca activa y no se acostumbre a un solo modo de comer.

Si tienes cualquier duda sobre alguno de estos accesorios para que tu perro coma más despacio, déjamela en los comentarios y te atenderé.