En las tiendas de animales podemos encontrar una amplia variedad de collares para los perros. La clave es saber cuál es el perfecto para tu mascota, por eso en Maskokotas queremos enseñarte los tipos de sujeciones para que tú elijas el adecuado.

Los collares lisos o circulares, que pueden estar fabricados en cuero o textil, son perfectos para el paseo. Además, le puedes poner una chapa identificativa. La ventaja que poseen es que no varían de tamaño una vez ajustados, y que cuanto más ancho es el collar más reparte la tensión por toda la zona del cuello del animal.

Por otro lado, hay que tener en cuenta que los collares de pinchos o eslabones no son buenos para los perros con pelo largo, puesto que se les puede enredar el pelo fácilmente y dañarse la parte del cuello. En principio esta clase de sujeciones estaban diseñadas para llevarlas con los pinchos hacia fuera, y así proteger a tu animal del ataque de otros caninos. Sin embargo, mucha gente los usa con los pinchos hacía dentro para adiestrar a su mascota, lo cual no es aconsejable porque puede causarle lesiones. Si quieres educar a tu perro lo mejor es buscar alternativas menos agresivas.

Una tercera opción son los collares de asfixia, que disminuyen su diámetro a medida que el animal tira de ellos. Están pensados para que el can deje de hacerlo, aunque esto puede ser peligroso para los perros, principalmente para los de pelo largo, porque al enrollarse su pelo se les puede encallar.

Normalmente este tipo de sujeción está pensada para una educación más estricta.

Los collares de cabeza son peculiares por tener forma de bozal, lo que no impide que el animal beba, jadee o ladre. Se usan sobre todo con el objetivo de que el animal no tire demasiado de la correa. En este caso es importante usar siempre correas cortas, no retráctiles, para evitar que si el animal corre y para de golpe no sufra una lesión de torsión de cabeza.

Por último, no podemos olvidar el arnés que, al rodear el cuerpo, reparte toda la presión de tiro de la correa por la parte anterior del animal. En los perros de raza ‘mini’ evita que esta presión vaya a una zona tan delicada como es el cuello del animal. Este tipo de collar es obligatorio en los viajes en coche, donde el perro tiene que ir sujeto al cinturón de seguridad.

Recuerda que, elijas el collar que elijas, hay que tener cuidado con las razas pequeñas, porque a veces tiran más de la cuerda y pueden sufrir daños en las vías respiratorias altas.

Otra consideración a tener en cuenta si tu perro tiene el pelo claro, es que ciertos collares de cuero y textil de color puede teñirlos. Asimismo, es importante revisar de vez en cuando el funcionamiento y el estado de conservación del collar que elijas, trata de comprobar sujeciones, hebillas y anillas para evitar sustos en la calle.