Sin duda, la principal característica del Sphynx es la ausencia de pelo aparente en su cuerpo. Este gato de talla media es muy vivaz, travieso e independiente. Es además muy afectuoso y, a veces, puede llegar a ser posesivo, aunque es muy sociable tanto con otros gatos como con perros.

Un poco de historia

Los gatos desnudos han ido apareciendo en diversas épocas de la historia. Remontándonos a la era precolombina, aparecieron gatos mexicanos de piel desnuda.

Siglos después, en 1938, el profesor E.Létard describió en Francia el alelo mutante h de gatitos desnudos nacidos de una pareja de Siameses. Ya en los años sesenta, se encontraron en Canadá algunos ejemplares de gatos sin pelo. La mutación espontánea responsable de ese carácter se encuentra en el alelo recesivo hr. En Holanda y Gran Bretaña también se describieron casos similares años más tarde.

Todo lo contrario de lo que ocurría en Francia u Holanda, en Estados Unidos estos casos no resultaban de gran interés. Sin embargo, visto el éxito de estos felinos, los criadores estadounidenses comenzaron a importar Sphynx de Europa.

Características

La cabeza del Sphynx es mediana y angulosa, ligeramente triangular. Tiende a ser más larga que ancha y se caracteriza por unos prominentes pómulos y una nariz corta. Suelen carecer de bigotes, en el caso de tener, éstos son cortos y dispersos.

Sus ojos, con forma de limón, son grandes y están muy separados entre sí. El color de éstos suele estar acorde con el del pelaje.

Del Sphynx destacan sus grandes orejas, siendo muy anchas en la base y con el interior completamente desnudo.

El cuerpo, de talla mediana, se caracteriza por su lomo fuerte y osamenta fina, aunque posee una musculatura buena. Respecto a las patas, la longitud de éstas está proporcionada con respecto al cuerpo. Sus patas delanteras están ligeramente arqueadas y son algo más cortas que las traseras.

Si dice que su cola tiene el aspecto de la de una rata, ya que es de una longitud mediana y fina.

Al contrario de lo que sucede con las otras razas de gatos, el Sphynx suda por la piel, por lo que es necesario asearlo regularmente con una esponja o un guante de baño. Sin embargo, no se aconseja bañarlo. También hay que prestar especial atención a sus orejas, las cuales hay que limpiar periódicamente.

Es, además, un gato muy sensible al frío, al calor y a la humedad, al que tampoco debemos exponer al sol, ya que podría sufrir quemaduras.

En cuanto a la alimentación, Sphynx 33 de Royal Canin, es un alimento hecho a la medida de las necesidades de esta raza. Su croqueta, especialmente diseñada para fomentar una buena higiene bucodental y estimular la masticación, ayuda a reforzar la función “barrera” de su piel, además de combatir la irritación. Es también altamente energética, así nos aseguramos de cubrir todas las necesidades de este tipo de felinos.