La leishmaniosis canina es una enfermedad mortal  que afecta a unos dos millones y medio de perros en Europa, siendo España uno de los países de alto riesgo puesto que se encuentra en la cuenca mediterránea. La enfermedad provoca una serie de síntomas que van en aumento hasta el punto de llegar a causar la muerte en muchos de los casos. Está causada por la Leishmania, que es un parásito microscópico que se transmite por la picadura de un pequeño insecto conocido como flebótomo o “mosca de la arena”.

Los síntomas no siempre aparecen de manera inmediata, los más frecuentes suelen ser fiebre, caída del pelo (especialmente en la zona alrededor de los ojos), pérdida de peso, úlceras en la piel y crecimiento anormal de las uñas. Los síntomas de la leishmaniosis canina afectan también a los órganos internos, pudiendo derivar en anemia, artritis e insuficiencia renal.

leishmaniosis perro

Existen tratamientos que ayudan a controlar los síntomas, pero no logran curar la enfermedad. Por suerte, hay laboratorios, como Virbac, que han logrado desarrollar una vacuna para estimular el sistema inmune y proteger al perro desde dentro. La mejor manera de prevenir que nuestros perros sufran la enfermedad es combinando antiparasitarios externos, para prevenir la transmisión, con la vacuna. Es necesaria una vacuna anual para poder mantener activas las defensas del animal contra la leishmaniosis canina.

En cuanto a qué perros pueden vacunarse, la mayoría de perros sanos mayores de seis meses y que estén libres de la leishmaniosis pueden hacerlo. Aunque desde Maskokotas os recomendamos que lo consultéis con vuestro veterinario, puesto que será él quien os aconsejará de manera personalizada.