Se acerca el momento en el que muchos de vosotros comenzáis a planificar las vacaciones de verano y, en el caso de los que tenéis gato, sabéis perfectamente que no son animales a los que les gusten demasiado los desplazamientos. Así que toca plantearse si el felino nos acompañará o no en nuestros días libres.

En el caso de que no tengáis previsto estar mucho tiempo fuera, una buena opción sería dejar el gato en casa y pedirle a algún amigo, vecino o familiar que se acerque de manera regular para poder ponerle la comida y cambiarle la arena de la bandeja.

Si pensáis pasar las vacaciones en una casa o apartamento alquilado, deberéis saber que normalmente los gatos solo se acostumbran a ellas si se les lleva allí regularmente, por ejemplo desde pequeños. Aunque muchas veces, la capacidad de adaptación del gato puede ser sorprendente, y es que muchos de ellos llegan a deprimirse a la vuelta de vacaciones después de haber estado, por ejemplo, pasando unas semanas en el campo. Suelen manifestarlo orinando en sitios inapropiados, o con falta de apetito o entusiasmo. Si ése es vuestro caso, os recomendamos visitar a vuestro veterinario.

Gato vacaciones

Como hemos comentado, a los gatos no les gustan los desplazamientos y muchas veces llegan a ponerse indispuestos cuando viajan, incluso aunque el trayecto sea corto. Por eso, os recomendamos una serie de pautas para ayudar a que vuestros felinos viajen más cómodos estas vacaciones. Los gatos suelen tranquilizarse con el calor, la penumbra y el silencio, por eso os recomendamos que viaje en una cesta de mimbre o bien en una caja de cartón recubiertas con papel absorbente en el fondo. Lo más probable es que, pasados unos 10 minutos, el gato orine, así que, una vez comprobado, procederemos a retirar el papel mojado para que el animal pueda continuar viajando cómodamente. En el caso de que el viaje sea largo, es aconsejable ir proporcionándole tanto agua como alimento de vez en cuando, pero nunca dejándoselo a su alcance dentro de la caja o la cesta.

Finalmente, si el medio elegido para viajar es el avión, os aconsejamos consultar con vuestro veterinario, ya que puede que haya algún tipo de tranquilizante que podáis suministrarle al gato. Otra solución, que podéis usar sin consultar al veterinario necesariamente, es Feliway, que, al imitar la feromona facial felina, crea un estado de seguridad en el entorno que rodea al gato y hace que le resulte familiar. Para facilitaros su uso, Feliway está disponible en spray y en difusor eléctrico.