Es una idea frecuente catalogar los tratamientos de peluquería para perros en el ámbito de la belleza. Esto se debe a que enlazamos automáticamente peluquería canina a los perros de exhibición. Sin embargo, es un error, ya que llevar de manera regular al perro a la peluquería no sólo es una forma de cuidar de su pelo sino también de su piel. Además, un servicio completo puede incluir limpieza de patas, orejas, dientes, ojos… Por lo tanto, es mucho más que un servicio estético: es una puesta a punto que afecta directamente a su higiene y su salud.

El precio de un servicio de peluquería puede variar mucho de un perro a otro. No sólo depende de que el profesional escoja las técnicas y productos más adecuados para el caso concreto, sino que tiene mucho más que ver con el estado del perro. Las necesidades de cada animal establecerán el tiempo que necesite para salir de la peluquería en perfectas condiciones y, por tanto, las horas de trabajo y su coste. Para poner un ejemplo, sería como contratar un servicio de limpieza doméstica. No costaría lo mismo si la casa simplemente necesita un repaso superficial a si está hecha un desastre o no se ha arreglado en años.

Al contrario de lo que se suele pensar, un perro que vive en entorno urbano puede acumular mucha más suciedad. Esto ocurre a causa de la polución del ambiente. Sin embargo, la suciedad que arrastra un perro que vive en espacios abiertos es diferente, porque aunque se vea más es profunda. En ambos casos, hay que bañar al animal con frecuencia, puesto que su aseo sólo limpia las zonas superficiales del pelo. Además, la higiene de sus zonas húmedas (hocico, ojos, orejas, ano…) es muy importante para evitar posibles infecciones.

Existe incluso el mito de que bañar a un perro es malo. No es cierto, lo que ocurre es que al lavar su pelo no sólo se elimina la suciedad superficial sino que se regenera la capa protectora que crea la piel canina. Utilizar un producto no específico para perros podría destrozar esta capa. Respecto a la calidad de algunas marcas en concreto, es igual que con la peluquería en personas. Si empleamos un producto o marca de cosmética profesional, la calidad se verá reflejada en unos resultados espectaculares frente al uso de un acondicionador estándar.

Por similitud con los humanos, tendemos a pensar que un perro de pelo largo necesita peluquería por el simple hecho de que tiene más pelo. Pero todos, aunque más o menos corto, tienen, y por tanto reúnen unas necesidades específicas a su pelo y su piel. Para los pelos de pelo corto es importante aplicar un tratamiento nutriente anticaída; a los de pelo medio, como pastor alemán o golden, se les practica el carding para eliminar el pelo muerto; y para el pelo largo, el tratamiento de nutrición es básico para evitar los nudos.

El pelo del perro es la protección de su piel, y su jadeo, el mecanismo para regular su temperatura corporal. Para explicar la importancia del pelo del perro, lo mejor es pensar en un tuareg que vive en el desierto con temperaturas muy elevadas. ¿Verdad que no van desnudos? Todo lo contrario, visten totalmente tapados, sólo dejando los ojos al descubierto, pues su ropa no abriga sino que evita que el calor llegue al cuerpo. En el caso de un perro, además, existen varias capas de pelo. Por ejemplo, en razas como los Spaniels (cocker, bretón, setter…) la capa de pelo secundaria sobresale de la primaria. Si no realizamos la técnica adecuada y simplemente rapamos, el cuerpo crea más pelo para protegerse y por lo tanto el remedio será peor: el perro pasará mucho más calor.

Las razas de pelo medio áspero, como el fox, el schnauzer o el westy, tienen una piel más gruesa. Por este motivo su pelo muerto no cae por sí solo y necesita esta técnica para renovar el manto. De lo contrario, los folículos pueden llegar a atrofiarse hasta el punto de provocar un problema dermatológico en el animal. La técnica del stripping consiste en arrancar el pelo muerto de su raíz, que a priori puede sonar a dolor ya que tendemos a comparar la piel de nuestra mascota con la nuestra. Esto es un error dado que la piel no es igual y, además, un peluquero profesional sabe cómo realizarlo de la manera más rápida e indolora. No sólo es necesario para estos perros, sino que no hacerlo podría derivar en un problema cutáneo.

¡Y eso es todo! Si te gustaría resolver alguna pregunta más sobre peluquería canina o quieres compartir tu opinión acerca del tema, no dudes en dejárnoslo en comentarios. 🙂