Amas a tu gato pero ¿conoces todos los cuidados que necesita su pelo?

El pelo tiene un papel fundamental para el gato, ya que es su defensa frente a amenazas externas:

  • Le aísla del calor y del frío

  • Le amortigua en posibles caídas o golpes

  • Le protege del ataque de otros animales y parásitos

  • Le da equilibrio y sensibilidad

  • E incluso le permite comunicarse

Por eso es muy importante que ayudemos a nuestro minino a mantener su pelaje en buenas condiciones.

Un pelo y una piel sanos son reflejo de salud y bienestar en el animal.

La muda

La temporada de renovación del manto coincide con la de los perros. Suben las temperaturas, cae el pelo.

La diferencia es que un gato doméstico vive prácticamente siempre en interior. En un hogar las condiciones de luz y temperatura (muy influyentes en los ciclos de muda) cambian respecto a las ambientales. Esto es lo que puede alterar sus épocas de cambio de pelo. De hecho, el gato pierde pelo durante todo el año, pero es cierto que:

Alrededor del 50 % del pelo que pierde el gato durante el año corresponde a los meses de calor

Desparasitación felina

La protección frente a parásitos que ataquen su organismo a través de su pelo y su piel es importante.

La amenaza no es tan fuerte como en otros animales de exterior. Sin embargo, recomendamos aplicar igualmente pipeta antiparásitos y collar repelente. Muchos insectos, como mosquitos y pulgas, pueden entrar a casa con facilidad.

*Consulta las opciones para evitar parásitos externos AQUÍ

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Digestión anticaída

La alimentación del gato influye de manera notable en la calidad y, por tanto, vida de su pelo.

La piel y el manto del gato están en su mayoría compuestos por proteínas, de modo que es importante que su dieta incorpore estos nutrientes. Para ello, lo mejor es incluir ingredientes de origen animal, como pollo, ternera o pescado. De lo contrario, la fuerza del pelo se verá afectada, caerá con más frecuencia y nacerá seco y quebradizo; mientras que la piel también puede escamarse y debilitarse.

El cepillado

Una rutina recomendable, e incluso necesaria en temporadas cálidas, es cepillar al gato a diario. Esto se debe a que los nudos de pelo pueden llegar a impedir la correcta ventilación de la piel felina. Por eso el cepillado no se ciñe únicamente a gatos de pelaje largo o especialmente delicado.

Ya sabes que tu gato, por su cuenta, se lame para acicalarse varias veces al día. Al cepillarlo, le ayudas eliminar el pelo muerto, dañado o enredado.

No sólo contribuyes a facilitar su higiene, sino que evitas que trague un exceso de pelo que puede causar problemas digestivos.

Las bolas de pelo causan al gato molestias y estreñimiento

Para prevenir la formación de bolas en su estómago, cepíllalo. En caso de que no hayas llegado a tiempo, puedes dar a tu felino un poco de malta para deshacerlas.

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Lavar y cortar ¿sí o no?

Con frecuencia se habla de la peluquería canina, pero no tanto de la felina. Posiblemente, el desconocimiento parte del falso mito de que todos los gatos odian el agua y por tanto no se les puede bañar.

Si bien es cierto que algunos no son muy amigos del remojo, como en cualquier especie, hay de todo.

Lo importante, teniendo en cuenta los beneficios que el lavado y el corte de pelo pueden aportar al animal, es habituarlos desde pequeños. Así evitaremos que el momento del baño se convierta en un mal episodio de estrés.

Una sesión de pelu gatuna permitirá a tu peludo afrontar el verano bien fresquito y aseado. 😀

Si tienes cualquier pregunta, no dudes en consultar con nuestros peluqueros especializados o pide cita para tu felino en el 96 321 98 02.