Una de las mayores responsabilidades unidas al cuidado de un animal doméstico es decidir si cruzarlo para que críe o no. Si desde un principio sabemos que no queremos que lo haga, lo mejor es esterilizarlo para evitar muchos quebraderos de cabeza. La intervención quirúrgica consiste en retirar los órganos reproductores y se puede hacer, tanto si es macho como si es hembra, en gatos y perros, pero también en algunos roedores y hurones. Es una decisión importante porque debemos pensar ante todo en el bienestar de nuestra mascota, por eso aquí te dejo algunas razones por las que tenerla en cuenta:

1. Suma en calidad y esperanza de vida

Es recomendable realizar la intervención cuando es joven. La esterilización reduce en gran medida el riesgo de enfermedades graves como el cáncer de mama, útero u ovarios en el caso de las hembras; el cáncer de próstata y los tumores testiculares en machos; y el tumor venéreo transmisible (TVT) o las infecciones en ambos. Cuanto antes se lleve a cabo la operación, menores serán las probabilidades de que el animal experimente estos problemas de salud en el futuro. La decisión puede llegar a aumentar entre un 20 y un 40 % la longevidad de tu amigo.

2. Mejora comportamientos extremos

La intervención elimina los procesos hormales y el celo. Esta regulación no sólo influye de manera física en los animales, sino que —igual que en nosotros— las consecuencias psicológicas y emocionales son notables. Tras la operación, comprobarás cómo sus estímulos se apaciguan, sobre todo en el caso de los machos, cuyo exceso de testosterona puede llegar a volverlos agresivos hasta el punto de que pasen del mero marcaje a provocar peleas por demostrar su poder frente a otros. En el caso de las hembras, desaparece la posibilidad de sufrir embarazos psicológicos.

 

3. Reduce el abandono

Un perro o un gato que se porta mal de manera incorregible, sea haciendo continuas trastadas o incluso actuando de forma violenta, puede provocar que su dueño se harte y ceda al abandono. Estas consecuencias se multiplican en el caso de una camada de crías procedente de un embarazo no deseado: dejar que tu mascota se reproduzca sin tener claro si podrás hacerte cargo de sus cachorros es una irresponsabilidad. El abandono como solución «fácil» a la superpoblación sólo contribuye a que las calles se llenen de animales sin hogar. La esterilización ofrece una alternativa a estos dos problemas, aun así la concienciación de las personas es una asignatura obligatoria.

4. Refugios y protectoras sostenibles

El buen funcionamiento de estos centros, la mayoría de ellos autogestionados por voluntarios y sin respaldo administrativo, se ve truncado cuando el volumen de animales que reciben se vuelve inasumible. La saturación consigue que sus servicios se vean desbordados y sus recursos (desde económicos hasta de espacio) sean insuficientes para ofrecer una calidad de vida mínima a todos sus inquilinos.

5. Aumenta la seguridad

Los instintos durante el celo pueden hacer que tu mascota se escape de casa, sea hembra o macho, ya que la llamada de la naturaleza le empuja a buscar pareja con la que procrear. Éste es un peligro grave ya que puede acarrear que el animal se pierda, sufra lesiones, se meta en peleas o sea atropellado, lo cual es un riesgo que no sólo afecta a él y a ti, sino que tiene consecuencias en el entorno: si provoca un accidente puede haber heridos, si hay superpoblación en ciertas zonas las condiciones de higiene o seguridad del lugar se pueden ver reducidas, etc. La gestión de animales abandonados es un gato público que puede evitarse si todos hacemos un ejercicio de responsabilidad.

6. Ahorrar no es curar en salud

Si eres de los que pone como excusa el «enorme» gasto que supone cualquier intervención veterinaria, puedes probar a ponerte en el lugar de tu mascota. ¿No te gustaría evitarte posibles riesgos si estuviera en tu mano prevenirlos? Escatimar en salud nunca trae buenos resultados, y en este caso un paso al frente a tiempo puede ser decisivo. Piensa, además, que no tiene ni punto de comparación el coste de la operación con el gasto que supondría un tratamiento para posibles enfermedades o el mantenimiento de los cachorros fruto de un embarazo imprevisto. Esterilizar a tiempo no sólo es una inversión en la salud de tu mascota, sino también alivia tu bolsillo y evita las molestias que puede acarrear un perro o un gato con las hormonas desatadas. A ti, a tu entorno y al propio animal.

7. Borra falsos mitos

Todas las ideas preconcebidas que circulan alrededor de la esterilización son falsas y sólo con la práctica podremos eliminarlas. Que si el animal se vuelve apático y perezoso, que si pierde vitalidad y gana mucho peso de golpe, que si todas las hembras deben parir al menos una vez en la vida… Basta con leer en voz alta estos «argumentos» para darse cuenta de que no hay por dónde cogerlos. El humor de un animal de compañía no cambia directamente por la intervención, sino porque —como he dicho antes— los niveles de hormonas descontrolados pueden llegar a ser problemáticos para ellos. Cuando éstos se regulan, nuestros compañeros tienden a ser más dóciles y protectores, que es en definitiva su carácter al natural.

Y éstos son los 7 beneficios de la esterilización de mascotas que recomendamos tener en cuenta.